¡Cuidado! ¡No sean vírgenes insensatas!
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La parábola de las 10 vírgenes | ¡Cuidado! ¡No sean vírgenes insensatas!
Hermanos y hermanas, creo que todos sabemos qué es la virgen inteligente y cómo convertirnos en ella a través de la discusión de ayer. Hoy continuamos compartiendo la discusión entre Bella, Rolla y Jack para que conozcamos las actuaciones de la virgen ignorante y cómo evitamos convertirnos en ella y ser abandonados por el Señor.
La hermana Bella: "Gracias al Señor. Ahora entiendo lo sabio de la virgen inteligente, que presta atención a esuchar la voz de Dios y reconocerla, por lo tanto puede recibir el regreso del Señor. Entonces, ¿cuál es la actuación de la virgen ignorante?"
El hermano Jack: "Las vírgenes necias no tienen un corazón de búsqueda y anhelo, ni buscan e investigan las verdades expresadas por Cristo para confirmar si son la voz de Dios. Siempre definen la obra de Dios por sus propias imaginaciones, tratando al Señor Jesús encarnado como una persona común y a las palabras de Dios como las de los seres humanos, y como resultado, son abandonados por Dios perdiendo la salvación del Señor. Al igual que los antiguos fariseos, no escucharon atentamente las palabras del Señor, juzgaron que Dios era una persona común según sus propias imaginaciones y opiniones, condenando locamente las palabras del Señor Jesús y resistiéndose Su obra nueva, finalmente fueron maldecidos y castigados por Dios".
La hermana Rolla: "¡Lo es! Las vírgenes prudentes son capaces de escuchar la voz del Señor, principalmente porque son las que aman y buscan la verdad y, anhelan la aparición de Dios. Por lo que al tratar el asunto de recibir al Señor, buscan e investigan activamente, y siendo así, logran distinguir la voz del Señor. De lo contrario, las vírgenes necias no aman la verdad, por lo tanto no tienen ni la menor intención de buscar el regreso del Señor, sólo se obstinan en la doctrina. Algunos de ellos se aferran a la doctrina de que el Señor descenderá sobre una nube, no aceptan ni investigan las profecías sobre Su descenso secreto. Otros obedecen y practican las palabras de los pastores y ancianos, nunca buscan e investigan el verdadero camino ni aprenden a diferenciar la voz del Señor. Algunos son aún más ignorantes, ni siquieran estudian lo que hablan de verdadero Cristo debido a la aparición de los falsos Cristos en los últimos días, e incluso se niegan y condenan al verdadero Cristo. ¿Lo que hacen encaja con la voluntad del Señor? Sin dudas, lo cual son las conductas de las vírgenes necias".
La hermana Bella: "¡Lo más importante para recibir al Señor es poder escuchar la voz de Dios! El Señor Jesús dijo: 'Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis soportar. Pero cuando El, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad [...]' (Juan 16:12-13). 'El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias' (Apocalipsis 2:7). De estos versículos, podemos ver que el Señor aún expresará verdades a las iglesias cuando Él regrese. Si sólo estamos atentos a trabajar duro, pero no buscamos la verdad ni distinguimos la voz de Dios, entonces seremos como las vírgenes necias, cuando el Señor Jesús venga, no lo reconoceremos, y al final, sólo seremos abandonados por el Señor, lloraremos rechinando los dientes".
El hermano Jack: "Vamos a leer las palabras de Dios: 'El que puede oír, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias'. ¿Habéis oído ahora las palabras del Espíritu Santo? Las palabras de Dios han venido sobre vosotros. ¿Las oís? Dios realiza la obra de la palabra en los últimos días y tales palabras son las del Espíritu Santo, porque Dios es el Espíritu Santo y también puede hacerse carne; por tanto, las palabras del Espíritu Santo, tal como se hablaron en el pasado, son las palabras del Dios encarnado hoy. Hay muchos hombres absurdos que creen que las palabras del Espíritu Santo deberían descender de los cielos a los oídos del hombre. Cualquiera que piense de esta forma no conoce la obra de Dios [...] Los que rechazan a Dios hecho carne son los que no conocen el Espíritu ni los principios por los que Dios obra. Los que creen que ahora es la era del Espíritu Santo, pero no aceptan Su nueva obra, son aquellos que viven en una fe vaga. Ese tipo de hombres nunca recibirá la obra del Espíritu Santo. Los que sólo desean que el Espíritu Santo hable y realice Su obra directamente, pero no aceptan las palabras o la obra del Dios encarnado, ¡nunca serán capaces de entrar en la nueva era ni de recibir la salvación completa de Dios!'".
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Las escrituras tomadas de LA BIBLIA DE LAS AMERICAS® (LBLA) Copyright © 1986, 1995, 1997 por The Lockman Foundation usado con permiso. www.LBLA.com.